Seguramente te has planteado colocar en casa un magnífico reloj de pared pero, hasta este momento, no te has atrevido a hacerlo porque no sabes ni dónde colocarlo ni cómo escogerlo. ¡¡Tranquila!! Te damos las pautas que debes seguir para hacerlo de forma correcta. ¡¡Toma nota!!.
¿Dónde colocarlo?
Lo primero que tienes que hacer es darte una vuelta, o dos, por todas las habitaciones de casa para comprobar el lugar adecuado donde colgar tu reloj. Una vez hayas decidido el lugar tendrás que identificar el tipo de decoración para saber qué estilo será el más adecuado. Ya sabes que no encajaría, para nada, un reloj moderno en un espacio rústico, y viceversa.
¿Qué tamaño escoger?
Ni que decir tiene que el tamaño del reloj variará de un modelo a otro. Lo ideal es escoger aquel, cuyo tamaño, no quede desplazado en la pared ni tampoco reste importancia al resto de elementos que tiene alrededor. Cuanto más grande sea la pared, el tamaño del reloj podrá ser mucho mayor. Ten en cuenta que si la pared es muy pequeña, el reloj se comerá todo el espacio.
Si en casa hay personas con problemas visuales deberás escoger un reloj con números que sean de fácil lectura.
El material del reloj.
De madera, metálicos… Tantos y variados son los materiales con los que está hecho un reloj. Dependiendoe la decoración de la habitación tendrás que decantarte por uno u otro.
¿Qué funcionalidad desempeña?
Está claro que en todos los casos te ayudará a conocer la hora pero, ¿hay alguna funcionalidad añadida que se le pueda atribuir? Lo vemos a continuación.
La cocina: un reloj de pared te vendrá de lujo a la hora de controlar los tiempos de cocción de los alimentos.
La entrada a casa, dormitorios, pasillos y comedor: Sin lugar a dudas el uso del reloj de pared en estos casos se asocia más a la decoración. De hecho, tal y como hemos comentado anteriormente, suelen aportar estilo y sofisticación.
Atrévete a decorar las paredes de tu casa con un estupendo reloj de pared. Quedarás encantada con el resultado. ¡¡Totalmente recomendado!!